tl;dr: Los días contigo ciertamente son mejores que los días sin ti.
~
Ahí estaba, extrañándote, soñándote...
Contaminándome con pensamientos inseguros sin raíz, flotando en una nube blanca venenosa.
Ahí estaba, cerrando un ojo, porque el otro ya estaba dormido, respirando con dificultad.
Esa noche, 11 de mis doce demonios murieron a manos del ángel de sangre.
Y cuando retiró la espada, me cercenó entre las vértebras, y la hoja alcanzó a acariciar mi corazón.
Dice el que sobrevivió que esa vez no pudo reconocer mi expresión. Y yo no me acuerdo.
Ahí estaba, llegando a una conclusión. Deliberando sobre mis próximos pasos.
Te agradezco, porque yo ya había hecho lo necesario para que no nos estrelláramos. Nos puse las cintas de seguridad.
Y tú lo hiciste también, pero lo hiciste tarde, y yo me lastimé.
Oh, qué más da: ya estoy acostumbrado.
Tú saliste ilesa.
Me alivia saberlo.
Se me olvida que hay más personas en tu vida. Pero me alegra, porque alguna día no estaré.
Cuando me da la infección, primero hay una fiebre leve que cede al segundo día, después duelen los músculos y huesos tanto que nos impiden trabajar. Todo eso de vivir realmente es muy divertido.
Me lastimé, porque no traía zapatos. Y te esperé. Y me esperé sentado, viendo el árbol desflorecer. Me recargué y los segundos pasaron, hasta que consumieron la carne, y la piel se pegó al hueso.
Me tomó por sorpresa.
Y después, fue suficiente tiempo. Desde el inicio supe la posibilidad.
En una versión no sucede nada porque la sensatez ha enraizado en la base de mi cráneo.
En la otra versión, el instinto vence a la razón. Y hay fuego, y explosiones, y orgasmos, y saliva, y sudor, y mordidas, comida, música, películas, y suspiros, y labios, y piernas, y brazos, y dedos, y ojos, y lenguas.
Y yo termino contigo hacia el final, porque desde el inicio lo supe. Tenemos una diferencia fundamental y nadie aquí va a cambiar de parecer. Aún así me entregué porque no tenía nada qué perder, porque no soy nada. O soy muy poca cosa, como lo quieras ver. Iba a llegar esa diferencia, y te di tu espacio y lugar y conociste a alguien que creíste merecedor y tuvieron un hijo pero su relación tampoco funcionó.
Y lo que el demonio que sobrevivió predijo, se cumplió. Se negó la ficción. Dijo "entonces ya pueden volver a estar juntos", y yo le grité con todas mis fueras esa vez, que porQUÉ CHINGADOS ME RECORDABA ESO. Si ver el futuro me duele, no quería saber.
Estamos viajando con nuestros cuernos nuevos.
Gracias, porque te importo. Ya es suficiente con eso. Sí, claro que quiero más pero no me lo merezco.
Me siento un poco adolorido, ja, no supe que ese futuro llegaría tan pronto.
Ahí estaba, pensándote, suspirando, transpirando hasta arder en llamas.
No hay comentarios. :
Publicar un comentario