6, El fin


Ishigo Ishimaru, estás mal de la cabeza; imagen 6
Mostrando las entradas con la etiqueta Miliv. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Miliv. Mostrar todas las entradas

diciembre 16, 2023

Cruzpiro.

Cuando no te vi durante una semana,

descansé.

No se cultivó la manía que me nació al verte.

No pensé en ti, no inhalé tus feromonas y no tuve que recurrir a la pornografía de chicas que se parecen a ti para disminuir la ansiedad.

Tan sólo un desperdicio.

octubre 12, 2023

Extrapolar.

Últimamente no soy lo que me veo, sino lo que tengo, lo que sé. 

Soy lo que hago, y hago muy poco.

Quiero poco, aspiro a, seguir con esta rutina hasta que no pueda más.

Ya me acostumbré a caminar solo.

Lo más probable es que rechace estar con alguien.

El subconciente no está de acuerdo.

Pero mi deseo conciente es no hacerlo.

;

Aún, hay estímulo externo,

y, aparente voluntad ajena. Iniciativa le podríamos llamar.

Entro en renuencia. ¿De qué me sirve esa energía?

Otro callejón sin salida,

otro ataúd de 2 toneladas a 200 kilómetros por hora.

Deslizo las manos en el agua fría, me sigue saliendo sangre de la boca.

Se va derritiendo la piel, surgen los cuernos,

surgen los colmillos,

las garras sujetan fuertemente la carne hasta exprimirla,

arrancarla,

un desgarre, un estruendo, un grito,

músculo y tejidos expuestos, salpican la cara,

esta es la inocencia que consumo,

hada de otro cuento, que vino a caer aquí,

al campo de algodón, donde me exiliaron,

donde no tengo de qué alimentarme,

donde uso mis poderes para replicarme y canibalizar.

He, hemos, ido más allá de los conceptos humanos de perversión.

Autodestrucción.

Todo lo que se han hecho ellos, nos lo hemos hecho entre nosotros.

Mente de enjambre, no sé si soy el original, pero soy el que queda.

Me comí al último clon que quedaba.

Me aburrí.

Entré en letargo al aburrirme de emular tantos ciclos humanos.

Luego llegó esa luz.

Y mi primer impulso fue querer tenerla, para lastimarla, para extinguirla.

Y así hice el primer momento, en la primera oportunidad.

La tomé de la cintura y hundí las garras.

Y la atravesé con mi lengua, y con todos los huesos que se me salían, que quisieron quebrarse y rasgar mi piel

para salir y hundirse en ella, y perforarla. Se proyectaron mis huesos como púas afiladas. 

Entraban y salían violentamente. 

La atravesé y clavé en el suelo, cada vez salpicando menos sangre.

Perdí la noción del tiempo. Anocheció. Amaneció. Quedó hecha pulpa. 

Un charco de carne molida húmeda, con astillas de huesos y restos de tejidos de órganos reventados, irreconocibles.

Eso no me sirve, no me lo voy a comer, solamente quería que dejara de existir.

El algodón tampoco se nutrirá de su sangre ni de sus vísceras.

¿A quién se le ocurre mandarme un ser de luz?


;

Estoy cansado.

Estoy cansado de sentir. De creer. De imaginar.

Los fines de semana escapo de tu cuidado, y encuentro manera y lugar para hacerme daño.

Hacerme daño que se va acumulando.

De lunes a viernes,

Logro vencer el impulso, absorbiéndolo, consumiendo, tomando una decisión antes que 

[                                                  ]

el deseo se convierta en manía otra vez.

Como la vez pasada, como la anterior, como la anterior a esa.

Como te dije,

no les sirve saber, por eso no les cuento.

Estoy bien, todo está bien. Solamente que me gusta alguien, y estoy destruyendo eso que finge ser un sentimiento.

No me sirve, pues no es correspondido.

Simple conclusión, como simple es lo que siento.

Me hago daño con café, o con cerveza, porque no sé de qué otra manera lidiar con eso.

Comiendo dos paquetes de Oreo en un solo día.

Se acumula con desvelos, con saltarme comidas sin que se den cuenta,

o sí lo notan.

Pero qué bueno que ya no me preguntan.

Sólo tengo que contener esto hasta que se disuelva, hasta que llegue la siguiente.

La siguiente que use de pretexto para lastimarme.

También cae en egoísmo, pues,

Este problema es mío, no se los comparto.

 

¿Has oído esa frase, "No eres tú, soy yo"?

Pues así, quisiera decirle.

Para que me deje de hablar, para que ya no sea amable conmigo.

Para que solamente tengamos una relación profesional.

Sin gestos que puedan llegar a malinterpretarse. Que pueda yo llegar a malinterpretar.

Nada personal.

Y nada personal contra ella.

Aquí el del daño soy yo.

¿De qué te sirve saberlo? De nada.

 

Tal vez después-

Quisiera decirle y que no cambie nada,

pero,

invariablemente sucede.

Por eso dejo este cuchillo en su estuche. Lo guardo.

Y me voy olvidando que existe.


diciembre 13, 2022

[] // {La misma parte de la historia, pero mejor desarrollada. // #Vivencial

Alrededor de casa hay lotes baldíos.
Se meten cucarachas, y otros bichos, a la casa.
Maté una cucaracha.
La puse en la mesa, tomé mis dos bisturí, le removí el chip. Ya tengo 18.
No me los puedo instalar, hasta marzo, cuando terminen de moverse archivos dentro de mí, cuando terminen de procesarse.
Y así poder tener suficiente descaro para decirle que nunca la quise realmente:
Me vuelvo a enamorar, para volver a caer en pedazos de metal derretido aún en llamas.
Me subo al tren donde está, pretendiendo querer lo mismo que ella, querer ir a donde va, para bajarme después, cuando no coincidamos. Pasándola por alto, avanzar a la cabina, salir, subir afuera de la máquina. Dejarme caer frente al tren en movimiento. [con los brazos en cruz para maximizar el daño] Arrojarme a las vías y que las ruedas del tren me corten. Que me corten en 5. Y esos 5 pedazos en otros 5.
Definición de demencia: repetir un proceso esperando un resultado diferente.
Le fui agarrando el gusto a este dolor, a esta compresión del corazón, a esta angustia mental. A la frialdad que sigue después. A juarme a mí mismo que no volverá a suceder.
Afort
desa
fortunadamente me dividí hace poco. Y ya tan sólo estoy esperando el accidente, un pretexto para desmoronar barreras mentales, retenes sociales.
Ahora lo puedo navegar.
Crearle un barco mental. Que zarparé en llamas cuando llegue el momento. [Y que estalle y que salpique sus pedazos sin que yo esté cerca. Innecesario, pero es lo que quiero en este escenario mental. ]
Que zarparemos juntos en llamas cuando llegue el momento. 

{La misma parte de la historia, pero mejor desarrollada.

Que rebote la luz de sol, eso te hace daño.
Nocturna, así te conocí. Tu carta de presentación, estar enferma.
No entendí tu predilección por consumir sangre humana, ni busqué entenderla, no me sirve para amarte más o menos.
Te volviste mi razón para cambiar mis hábitos de vida. 4 de la tarde, mi día va comenzando.
Al salir del bar, iba a visitarte al teatro, donde solias estar. 

Cuando te conocí, aún reías, aún querías bailar. 

Fui testigo, pareja, cómplice de tu decadencia, de tu salud en deterioro. Pensé ingenuo que la medicina moderna te podría ayudar. Te llevé a que te trataran y todos decían lo mismo: No tienen idea, pero está avanzando. 

Nunca me has llamado 'tu amor'. 

Colecté algunos despojos de la calle, de quienes te alimentaste. Sus órganos frescos parecían ayudarte, parecían alentar tu condición.
Pero te seguían apareciendo manchas en la piel, junto a las otras manchas. Y cada vez estabas más débil. Ya no querías bailar. 

Se acabó la temporada de teatro, y regresaste a tu casa. A tu mansión vacía.
Cambiamos las costumbres de salir por quedarnos en casa a beber té, a leer, a platicar de nada. A que te dejaras invadir físicamente con mi cuerpo, casi en cada visita. Labio con labio, piel con piel.
Un verano no fue suficiente, por eso te invité a viajar.
Y tú,
sinceramente
no tenías mejor opción.
Vendí todo lo que poseía para comprarme el barco,
para contratar tripulación por un año, buscarte una cura en otro continente,
después,
no sé,
no sé si seguiré vivo si en un año tú mueres. 

Fueron maravillosos esos meses, antes de tu colapso.
Disfrutabas la luna, porque su luz es reflejo, dijiste, no tiene eso que te hace daño del sol. "Es una falsa", dijiste. Lo llamaste un 'filtro'.
Antes,
dijiste algo que nunca me habías dicho,
dijiste "por favor". "Si me quedo dormida, quiero volver a despertar, por favor". Ni sabías como pedirlo porque siempre habías exigido. Siempre te cumplían tus caprichos.
Pero entendías muy tarde que soy uno que se queda. Que me quedo hasta el final aunque no me convenga, aunque reciba miserias cuando entrego el corazón. 

Hacía calor. Esa noche en altamar, hacía calor. Ya no nos quedaba media luna para admirar. Te regalé un clímax para que durmieras mejor, y te quedaste dormida en mi pecho. 

Ya no despertaste.
Nunca te dije que te amo. 

Te hicimos transmisiones de sangre. Fui experimentando, pero en el estado en que estás, ahora requieres consumir cada día.
Mi sangre te hace daño, por desgracia; el médico dijo que por exceso de... vita.
Habla de vita... vita-midas? Dice muchas palabras que no entiendo.
Por eso lo dejamos en una de las islas. Además se nos está acabando la comida.
Nos acercamos al frío polar, para conservar mejor la sangre guardada.
Extraño tus ojos, viéndome. Extraño regañarte. No es lo mismo verte ahí acostada, inconsciente, oyendo mis historias exageradas de cuando fui ayudante en una panadería, y uno de mis compañeros perdió dedos de la mano. Te habrías reído histéricamente. 

Pasaron un par de meses, un par de incendios, un par de motines, un par de inundaciones, un montón de cuerpos que se fueron intercambiando conforme llegábamos a otras islas: unos nos querían abandonar, otros unirse, otros los tiramos a alimentar el mar. Llegamos al otro continente. No encontré solución. En cambio, querían matarte. Querían que no despertaras. Tuvimos que irnos apresurados.
Han pasado dos meses. No sé qué voy a hacer. 

}

#Vivencial
Cuando llegué al lugar que estaba rentando, me recibió la casera. Una señora muy guapa, poco mayor que yo, sonriente, con vestido, que lucía sus piernas, porque hacía calor.
Llegamos a mi cuarto, pintura aguamarina.
Crucifijo en la pared.
Mencionó, sin que se lo preguntara, que su marido trabaja en campo "con el machete". {después me enteré que sólo decía eso para que no intentaran ligarla}
#TodoEsFicción Mi pasado es una ficción que no puedes comprobar.
Quien usaba el machete era ella.
Ya llevaba dos cuerpos enterrados en el patio, y cuando estuve yo, enterró a un tercero.
Ahora no salí/en otra línea de tiempo fui su cómplice.
Vi,
demasiados,
demasiadas,
alternativas
a este tiempo que estoy/amos viviendo
Me quedé con las manos vacías, los brazos, el pecho vacíos.
Aquí, en este bucle, decidí no intervenir.
Eran pocas las líneas donde nos atrapan, de
todos modo
s.
Doña Julia, bueno, señora Julia.
Aunque tenía alcoholes y licores ahí en la casona donde nos quedamos,
iba a un bar, a re-recordar al hombre que la dejó,
al que no pudo superar,
libertad hecha persona,
pero,
nada es absoluto en las personas,
porque como te dije, mentía sobre estar casada.
Y sabía que los locales no nos platicarían tan fácil sobre ella.
El alcohol era su cadena, su retén, su impedimento para ser libre de verdad.
El alcohol era un pretexto, el origen era el dolor.
Y un síntoma era buscar sexo con jóvenes que fueran de paso por el pueblo.
No me tocó esa vez, este bucle.
Vi otros, y a otros.
No conocí al del tercer cuerpo.
\\


Paralelismos 1B. Criofagia, aún.

Este fin de semana no tengo a quién enseñarle mis cortadas.
Mi amiga M. me sugirió que considerara la terapia, tan sólo le conté que fantaseaba con metal abriendo caminos en mi piel.
No le dije que lo hice en verdad. No le dije a nadie.
Este dolor es para mí solamente.
Y su preocupación no me sirve.
Pero me arrepiento de marcarme, me gustaría que no dejara rastro, para poder seguir haciéndolo, indefinidamente.
Los nervios gritan en silencio, ya no les hago caso. Así como mis estúpidos intentos de llamar la atención no funcionaron antes.
No sirvo, ni como mal ejemplo, porque continúo esta farsa funcional que llamo vida, y no me suicido, no le doy un final innecesario a este absurdo, esta vida inconsecuencial.
Al regresar al departamento, me hice un par de hotcakes. Les puse salsa picante de habanero verde, porque quería recordar cuando éramos pobres, y eso era lo único que teníamos para comer. Aún me arden las cortadas.  

Este fin de semana no tengo con quién compartir la serie que encontré, que me gustó bastante, tiene todo lo que busco en drama de ciencia ficción. A veces las guardo, las respaldo en dvds, pero voy a empezar a respaldarlas en discos externos, para cuando haya alguien con quien (volver a) ver todo eso. Así me engaño, creyendo que va a existir alguien. Que voy a aceptar a alguien más en mi vida. Me engaño creyendo que voy a invitar a alguien más a este vacío. ¿Cómo para qué? Todos están bien lejos de mí, por eso me vine a vivir hasta acá. Voy a caer a un río y desaparecer entre escombro y basura. Fui feliz, sí claro, para lo que sirvió. Y que no encuentren mis rastros, ni sepan quién soy, porque me voy sin identificación. Me quité las costras con navaja para que me volvieran a abrir. Sangré, y casi se me pasó la mano, tuve un susto. Aún me arde, pero al menos ese dolor opaca los sentimientos. 

Este sábado, no salí tarde de trabajar, salí a "mi hora".
Decidí no ir a la plaza después del trabajo, a comer, porque es un gasto que preferí evitar.
Aquí hace mucho calor.
Mejor regresé a casa y tomé un suero sabor uva del refrigerador. Me acosté y me quedé dormido.
Desperté una hora después, con ganas de salir, así que salí.
Tenía el plan en la cabeza de tomar un par de cervezas e ir a bailar, tenía esa intención.
No comí, la cerveza me haría efecto más rápido.
Dejé mensajes, de que estaría ahí, en el centro, por la revu, por si querían, y nos veíamos.
Tardaron en contestar, para dar negativas.
B. estaba ocupada, estaba en otra fase de su vida. Ya había pasado de mí... Era/es a la que consideré más,
pero,
qué bueno que está bien y que no me necesita.
Nunca me necesitó.  

Los otros que contestaron, querían que yo fuera a donde estaban ellos. Ya me había tomado una cerveza, no me quise trasladar, ni coincidimos esa vez.
Ya han pasado años. Creo que no les interesa. Creo que son egoístas como yo.
Un poco más de iniciativa y sí iba, porque ya pasó antes, pero, sólo era llenar el vacío de la soledad, con el vacío de la compañía de desconocidos.
No me divierto en las fiestas; todas las veces que fui, busqué embriagarme para pensar menos. Bailé un par de veces con chicas, y no pasó nada más relevante. No hice amigos. No fui suficientemente interesante. No sé tocar un instrumento. No soy más listo que el promedio. No tengo temas de conversación. Bueno, al menos no digo mentiras. 

Dos cervezas, ya estoy mareado.
Pasa otra hora, extendí mucho esa tercera cerveza.
Nadie va a venir.
Otro fin de semana que no bailé, qué pinche desperdicio.
Mío, para empezar, lo que soy, porquería. 

Regresé al departamento a engullir helado. A tomar Vodka.
Compré una cubeta de helado de multisabores.
Me gusta el helado, me gusta el hielo, y las cosas congeladas.
Quizá porque no es lo natural, comer hielo.
Lo natural son las cosas tibias.
Me gusta que me entuma la lengua. Que los sabores vayan apareciendo poco a poco. Hasta me gusta un poco el dolor de cabeza por comer helado muy rápido.
No me gusta cortarme la lengua y la mejilla por dentro con los hielos afilados, pero eso sigue siendo #vampirismoforzado .
Puse esa serie como sonido de fondo, lo bueno que, no importa qué tan fuerte llore, qué tan fuerte salgan mis sollozos, mis vecinos no me oyen.
Otros seis tragos de vodka. Otros 3 vasos de helado.
Entre la neblina visual, recuerdo que corrí al baño.
Lo último que recuerdo de esa noche es que lo estaba vomitando, porque comí y tomé demasiado.  

Cuando volví en mí, la chica tenía ambas manos en mi cuello, apretando con fuerza, pero se notaba su vacilación,
su cara expresaba confusión aún,
¿quién chingados es? pero entendí rápido lo que estaba pasando, porque lo escribí antes y lo dejé en un cajón, y había sido leído.
Le dije que se quitara, pues, que no sabía lo que estaba haciendo,
que ¿cuánto le debo? me acomodé el pantalón, le pagué y la acompañé a la salida. Olía rico.
Vi que había sol, no sabía qué día era, hasta que regresé y abrí la laptop. Ya era el otro día. Sabía que me iba a doler la cabeza horrible, pues mi otra personalidad había tomado control, cuando yo me apagué. Él había leído la nota. Y buscó a una de la calle, hasta que encontró a una que accedió a eso.
Pero no se divirtió, por eso regresó a su baúl. Dejamos un charco donde estaba acostado porque las cortadas se me abrieron. Quizá por eso vaciló la chica. 

Este sábado, no tengo con quién suicidarme, lo pospongo una semana.
Idealizo el suicidio porque es una decisión propia, una acción propia. Probablemente ya no lo vuelva a mencionar. Ya lo dije suficientes veces.
Ya no le cuento a nadie. De todos modos, qué bueno que ya no se preocupan.
A veces no es lo físico, es lo mental. Quisiera no pensar.
#basadoenHechosReales
Pero ves, no me morí.
No, no tuve ese descanso. 

Tú crees, ¿que no entiendo? Todo lo que eso conlleva, es un pensamiento horrible, es como llevar una granada, y dejar que estalle cerca de mis seres queridos. Mi repentina ausencia los lastimaría.
¿Tienes idea? la tienes? Saber que les importo, al mismo tiempo que quisiera ya no estar tan cansado, ya no pensar, ya no sentir.
Por eso muchas veces no te hablo.
Por eso me quedo dormido, mejor me duermo para no sentir. 

 

diciembre 11, 2022

Sequía, 2022. [d]

(Yo pensaría lo mismo)
Lancé las runas,
lancé los huesos,
mis gatos ya no están aquí.
Leí tu destino y nos aborrecí por caminarlo.
Te detesté por ser tan perseverante, pero más a mí por permitirte quedarte.
Que sepas que nunca fue tu elección.
Vuélvete a dormir, nuestros crímenes no te han alcanzado.
Y querías estar conmigo.
Y eres la mujer más bonita que he conocido en todas mis vidas.
Y tuve la infortuna de que fuera mi línea de tiempo donde/cuando te conocí. Y ahora todas las demás van a quedarse cortas.
Extraño los maullidos. De mis amigos de 4 patas.
Extraño tus gemidos, Celeste. Me removías las entrañas y producía más. Y hasta me dejabas temblando al terminar.
Ahora que has muerto, se me ha secado el corazón.
Me detesto porque sellé tu destino cuando te dije que sí, que podíamos vivir juntos. Supe que te ibas a morir.
Detestaré todos los eneros de ahora en adelante. Aún cuando esté con alguien.
Me quedé en el camino, sólo, y de qué me sirve tener todo, si no estás tú?
Ahora ya no tengo qué trabajar.
Paso mis días en el jardín, viendo fotos de gatos en Facebook, por horas. Hasta que vuelve a ser la hora de comer.
Y vivo solo, así me quedé. Soy suficiente para mantener la casa.
Si me salto una comida, no tengo qué limpiar. Aunque ya me duele adentro forzarme ayunos.
No volví a ir al médico por el otro asunto. Quiero que me carcoma.
Pido comida mediante la aplicación, el jueves, pizza, tu favorita, y me la acabo yo solo. Es la única de 2 interacciones a la semana que tengo.
Veo comedias y río por fuera. Tomo vino, me acabo media botella yo solo. No es suficiente. Por desgracia, sigo pensando. Sigo pensando en ti. Te sigo recordando. Sigues doliendo como si hubiera tragado vidrios.
Ardes en los ojos como sal, que provoca sal.
Salgo a la sala y estrello la botella contra la pared. Y el viernes en la mañana lo limpio. Eso es todo lo notable de la semana.
Mi otra interacción es ir de compras, una de tus actividades favoritas, me encantaba verte emocionada por comprar jabón. Me encantabas tú, con olor a jabón. Compro el vino que dejaré a medias para después aventar contra la pared. Esa es toda su función.
Extraño tener gato, pero aunque mi corazón ya no se puede romper más, no me quiero arriesgar, a estar equivocado.
Te extraño, y sé que no te puedo remplazar, por eso no lo intento.
Aún la luz quiere brillar, se quiere compartir, las ganas de vivir son necias en apagarse. No les hago caso, regreso al sillón de la sala, a dormir.

  

[Limbo, 2163.]

diciembre 03, 2022

Después de

El periodo que nunca te conté
Que notaste
Cuando no contestaba los mensajes
No los contestaba inmediatamente, como solía hacer.
¿Para qué?
¿Para qué me esfuerzo?
¿Para qué comparto mi tiempo si no lo aprecian?
Nadie me lo pidió tampoco, ese enojo no era contra ellos, era contra mí, por ser tan débil. Por pensar de más, hasta por ellos.
No contestaba los mensajes, no a tiempo, así como los demás. Me reducía a lo que eran ellos, decidí perder mi empatía y comprensión y juzgar que no contestaban porque simplemente no les importa. En ese tiempo quise pensar así, lo hacía más fácil, culpar a los demás.
Poco después cumplí años. No contesté mensajes de felicitación. Palabras vacías, se encontraron con eco inexistente. ¿Para qué contestar cortesía forzada?
Manejé muy mal ese quiebre, tomaba todos los días. Todos los pinches días.
Fui al trabajo ebrio un par de veces, pero por como actúo 'normalmente', no se notó.
El penúltimo de esos días, mi compañera de trabajo, a la única que le hablo bien, me preguntó. Se lo confirmé. A ella sí le importaba, por lo que me delató.
Me llamaron de gerencia para hablar conmigo, puras pinches pérdidas de tiempo. Que fuera con la doctora, me dijeron ordenaron. Les dije que sí, anoté las fechas y horarios. No fui.
Seguí con mi trabajo hasta que se dieron cuenta, me volvieron a llamar.
Que podían darme de baja si no recibía ayuda.
Los cuestioné, si mi trabajo no había bajado en rendimiento, entonces me darían de baja sin motivo laboral válido, los tendría que demandar.
Ese asunto de las terapias quedó como sugerencia. La chica de RH fingió preocupación, que a ella le interesaba que fuera, que por salud mental, etcétera, le preocupaba más que afectara a mis compañeros con mis ideas. Yo casi ni hablaba con nadie. No le agradecí nada.
Cuando enfrenté a mi compañera de trabajo, la abracé, la abracé muy fuerte,  le agradecí la preocupación, pero le dije que no tiene que hacerlo. ¿Que por qué hice eso? Porque quería que me corrieran, atenté contra mi vida.
Y que si volvía a ayudarme sin que se lo pidiera, le dejaría de hablar. 

 

noviembre 23, 2022

Paralelismos 3. Ana Vanessa.

En esta dimensión están
extinguidas
mis ganas de ser papá.
Está extirpado todo vestigio si alguna vez existió, de querer procrear, reproducirme, tener hijos, vivir la paternidad.
Cualquier otra consideración que hubiera tenido, fue teórica, no en serio, y nunca tuvo fundamento sólido.
Aquí, no tengo hijos, ni los voy a tener. No voy a ser papá.
Creo que sería terrible en ese papel.
O sería muy permisivo, o muy restrictivo, y cada día sería tener que vencer el impulso de [\\pesadillas\\pesadillas\\pesadillas\\].
Tiene mucho tiempo que elegí esto para mi vida. Tendré mascotas, eso sí, que pueden llegar a ser tan absorbentes de tiempo como un bebé humano. Cualquiera que tenga mascotas y las cuide bien te lo puede confirmar. Pero juntarme con una mujer y hacer otro ser humano, no. Sería terrible para el mundo multiplicarme, aunque no lo hago por el mundo, lo hago por mí. Otra razón fuerte es que son un gasto. Y no quiero gastar en eso. También gasto emocional. Si yo a veces no estoy bien imagínate traer así[en mi estado] al mundo a alguien más. 

Pues, todo esto que te cuento que evité, alguien en alguna otra dimensión lo aceptó para sí mismo.  

Llamémoslo, Leonel.
Leonel, y, Luz, se llama la otra chica. Luz Adriana.
Fue un error sumarse pero el resultado no fue un error: Ana Vanessa la llamaron.
Y ambos se esforzaron tanto para que creciera bien.
Se separaron.

Como Leonel:
Ya estoy divorciado. Separado desde hace años.
Vanessa sigue en la universidad. Tuvo su periodo darky y se creía original cuando su mamá y yo fuimos precursores de eso allá en XXXXX [ciudad].
Todavía no tiene idea de cuánto la amamos, no ha conocido tal dolor, tal preocupación de saber que una parte de ti está allá afuera viviendo su propia vida y acumulando sus propias experiencias.
Una parte que habla y responde y piensa y contesta.
Una parte de ti que ríe y llora y disfruta y está en contacto con otras personas, similaes y diferentes a ella que la pueden afectar, hacer crecer o lastimar.
#Angustia
Antes de que naciera, platicamos sobre cómo le pondríamos. Me sorprendió que Luz quisiera llamarla Ana, como se llama mi madre, pero ella por otras razones. Yo elegí Vanessa por Vanebon, la desaparecida. Entonces le pusimos ambos nombres: Ana Vanessa.
Puede que Luz y yo ya no hablemos, no como antes, pero seguimos en comunicación. Por cualquier cosa relacionada a Vanessa nos mandamos mensaje o llamada. Y no hay resentimiento porque ambos crecimos cuando ella nació, y nos dimos cuenta que ahora debíamos ser mejores por ella. Y lo mejor al final resultó no estar juntos, porque ya no queríamos estar juntos. Y nunca le ocultamos esto a Vane, porque ella se merece siempre la verdad. Y se lo dijimos y se lo demostramos, que el hecho de que nosotros ya no nos queramos, como antes, no quiere decir que no la queremos a ella. Al contrario, no la íbamos a exponer a una relación que es una fachada, una mentira. Y que no era ella la razón de separarnos, sino nosotros mismos. Ella es más bien la razón para estar bien.
Esa vez la llevamos a comer un helado, cuando le dijimos. Estábamos tranquilos, en paz con nuestra decisión. Nos vio sonriendo porque estábamos con ella, nuestra razón para sonreir.
Lo más conveniente al principio fue seguir juntos, vivir en la misma casa. Aunque fue doloroso para Luz y para mí, atravesar eso, aceptarlo, pero lo platicamos mucho, logramos volver a ser amigos, a sentir ese aprecio con el que todo empezó. Un tipo de amistad rara entre adultos que compartieron y comparten algo importante en sus vidas.
Eventualmente Luz se salió, regresó a casa de sus padres, donde por cierto ya no vivían, así que estuvo cómoda. Nos organizamos para llevar a Vane a la escuela. Vane podía quedarse en casa de cualquiera de los dos. A veces, cuando la tenía yo, quería ir a ver a su mamá, así que la visitábamos, y viceversa.
Y después de eso no hubo mucho cambio en nuestras vidas. Sin contratiempos raros ni visitas inesperadas al hospital. Solamente una vez nos hablaron de su escuela, pero fue culpa de otra persona, nos decidimos por cambiarla de escuela mejor.
Regreso al presente, Vane se está quedando en otro lugar, por la escuela. Desde hace rato que volví de lleno a los videojuegos. Como dije, las cosas no cambiaron mucho después de que encontramos esa estabilidad.
No he vuelto a tener pareja, porque no he buscado. Luz, en cambio, sí está con alguien, y está bien, y es feliz, lo que me da mucho gusto. 
 

noviembre 21, 2022

Paralelismos 1. Criofagia.

Este sábado, él salió a su hora normal de trabajar. Descansa el domingo.
Regresó del trabajo a casa, al lugar donde renta, a descansar y comer.
Es sábado en la tarde, quiso salir a tomar un par de cervezas, ver el tiempo pasar, y si nada más sucede, regresar a casa a descansar.
Desde temprano mandó invitaciones a varias personas, pero aún nadie le contesta.
Están ocupados.
Cada quien tiene su propia vida.
Algunos no lo consideran, y ya están enfiestados a las 3 de la tarde. Qué envidia.
Aquí se divide en dos, porque en una de las líneas no está B.
Y en la otra, y en esta, sí está presente. No me lo explico aún, sino que hay muchas divisiones que ya no alcancé a ver la vez pasada.
La línea de tiempo ajena que veo más clara, es donde ella no está. 

Como él:
Compré un congelador porque como hielo. Me gusta comer hielo. Me gusta masticarlo y que se rompa.
Me gustan las cosas congeladas, que se enfríe mi boca y se entumezca, y que los sabores vayan apareciendo poco a poco.
A veces los filos por romperlo me cortan la lengua y el paladar, eso no me gusta, pero sucede.
Me sabe la boca a sangre por las heridas,
#vampirismoforzado ,
pero no dejo de comer hielo.
El dentista me dijo que no lo haga tan seguido, porque afecta mis dientes.
No me importa, lo sigo haciendo. ¿Él qué va a saber? Sólo es un doctor.
Comparto esta arrogancia con mis otros paralelos. Como si no lo has notado... 

Salí temprano, a la revu, a tomar unas cervezas. Nadie me ha contestado, será otra tarde que tome solo.
Ya voy viendo como se rompe el corazón otra vez, otro poco. Otro pedazo tirado a la basura. Otro corte y sangre enjuagada circulando el drenaje en mi regadera. otro pedazo que se va por el drenaje.
Anduve con dos chicas sólo para tratar de olvidar a la que ya no está, por cierto.
Con una de ellas sólo anduve porque se llama igual que una chica que creamos, Diana.
Nunca fueron intenciones a largo plazo.
Se pusieron serias,
entonces,
fingí desinterés, y se alejaron rápidamente. Terminamos, no bien, tampoco terrible, pero no bien.
Bueno, Diana todavía sospechó, y quería "luchar por lo nuestro". No entendía, si ella sí estuvo bien, dijo que era "la relación más estable y feliz" que había tenido, por qué me quería ir. Me dio tristeza que con todos los anteriores no tuviera estabilidad. Pero lo entendí al conocerla porque ella no sabe elegir. Ese inicio lo elegí yo, no ella, por eso nuestra relación fue diferente a todo lo que ella había tenido.
Aceptó la felicidad, y yo también la acepté y me gustó. Pero me di cuenta que no estaba con ella por las razones correctas, y ella merecía más, o algo mejor.
También ahí decidí por ella, y fue injusto, porque no le di oportunidad. Ni me la di a mí, de poder cambiar de opinión.
No,
no lo iba a hacer.
No voy a cambiar por alguien más.
A la primera que mencioné ya no le hablo.
Con Diana, todavía nos tenemos agregados en redes sociales, pero no interactuamos, ella no ve mis cosas, creo.
Yo sí veo las suyas, pero no interactúo, aunque ande haciendo cosas que me gustan.
Veo a través de sus publicaciones felices, que la delatan, porque son pocas, que está hecha una ruina, así la dejé.
Al menos, creo, aprendió de mí a construirse sola, sin ayuda de nadie.
Regreso al presente.
Segunda cerveza a la mitad. Delibero intensamente en mi interior si cenar, o no.
Se inclina la aguja hacia el 'no'.
También tenía algo de ganas de bailar.
Alargué mucho terminarme esta segunda cerveza.
Sólo recibí dos respuestas, con media coherencia, compartiendo el sentimiento de reunirnos, pero indicando que yo fuera a donde estaban ellos, y con más gente. Amigos de mis amigos, no son mis amigos.
Generalmente me caen mal, también es algo que comparto con mis paralelos, la mayoría.
Por allá en otra línea de tiempo, es al contrario; me quedé con los amigos de mis amigos, y a los que eran mis amigos ya casi no les hablo. Y los amigos de mis amigos se hicieron amigos verdaderos, la familia que elige uno.
Pero no aquí, este fin de semana, están ocupados, o de viaje, lejos, ya dormidos, con sus parejas, su familia. O en una fiesta donde voy a ser "un invitado más". No gracias, ya me he sentido así toda la vida, no me hace falta sentirme así un día más.
Este fin de semana no queda espacio en sus vidas para mí.
Lo sé. Lo entiendo. Lo respeto. No me gusta. No tiene por qué gustarme. Acepto la situación. No los dejo de querer, porque es egoísmo de mi parte, querer más de ellos, a final de cuentas.
Estaban bien sin mí antes. Y ahora que me conocen, no soy necesario en sus vidas, y qué bueno.
Llegué a pensar que tal vez terminé muy pronto con Diana. Tenía sus ventajas vivir con ella. Pude haber fingido por un año más. Pero durante ese año correría el riesgo de cambiar de opinión, establecerme con ella, y entregarme por completo.
Estaría a su merced.
Y cuando todo inevitablemente acabara (lo pienso porque soy fatalista), tendría que recoger mis propios pedazos, ahora yo, pero habría más fuego y sangre metafóricos en esa ruptura. No como en el presente, que tuvimos una separación limpia, y le costará menos salir adelante.
Veo la cerveza aún fría, romantizando el regresarme ya a donde estoy rentando, para dormirme. Para terminar de deprimirme, no cenar, no jugar, no pensar, sólo concluir el sentimiento que inició hace rato, y dormirme así.
Me termino la cerveza, pensando, lamentando inútilmente "Otro fin de semana que no bailé".
Ya mejor me voy a mi casa.
No quiero estar aquí.
No quiero estar en algún lugar.
Quisiera desaparecer. 

noviembre 05, 2022

Criófitas 1.

Cuando duermo, a veces sueño con el interior.
Con la ciudad que he construido ladrillo a ladrillo. Con la nave que me robé del espacio y que bajé con la mano a la tierra.
Había muchas palmeras, porque hacía calor, porque alguien me quiso alguna vez.
Un bosque tropical.
Me robé el frío de otro subconsciente. Ingerió sus criogenias mi alma al tocar el interior, al soñar con ellos. Y al volver al bosque, ya estaba congelado.

Cuando veo en tu interior, provocas una precipitación en mí;
Llueves por dentro en mí, constantemente.
Alimentando el bosque congelado, más espinas traslúcidas dividen luz en sus colores, que se desploman a la arena debajo, iluminando y marcando una fuente.
Aún brota alcohol sabor fresa ahí. Esa fuente no se detuvo solo porque no te conté.

Tu amor quiebra el interior de fantasmas teóricos en mi subconsciente.
Contraproducente.
Tu desdén me impulsa.
No me quieras, porque voy a querer más.
Voy a querer todo. Y voy al final.
No hay vuelta atrás, como cuando rompí las ventanas de tu casa, y me escondí ahí para madrearme a tu primo.

Adopté este bosque congelado de alguien más, que con su amor terrible me mantuvo con vida.
Amor y transfusiones de sangre y médula. Porque no quiso quedarse solo el cobarde, y por eso arriesgó su vida con esa operación por mí, para mantenerme aquí. 
Pero mi bosque es de palmeras, porque alguna vez hizo calor en el oasis.

Y desde entonces vivo en constante furia, enojo, decepción, renuencia, aceptación.
He tragado litros de sentimientos de diferentes colores y nunca tendrás el derecho de decir que estoy equivocada.
La transfusión de médula incluyó un injerto místico, una astilla de su alma, que funciona como antena para llevarme a pasear a sus dos acompañantes imperceptibles. Un efecto secundario del que ahora me aprovecho. 
A la otra no la puedo separar si no quiere.
Siempre hemos sido todos estos, 6 almas y 2 cuerpos.

Vivo en luz también.
En periodos que pierdo la vista y Camille me tiene que ayudar.
En periodos en que quiero abrazar al mundo, y heredar mis fortunas para mejorarlo para los demás.
Vive un interruptor en mí que no es constante.

Hubo periodos cuando le escribí cartas de perdón a mi madre, diciéndole que estoy bien, siempre lo estuve.
Tenemos negado el acceso a nuestra vida anterior.
Excribí 12, que voy a quemar, como a las otras 12.
Hay días que me levanto temprano a hornear un pastel de chocolate. Cuando llega el medio día, lo acompaña la depresión, puntual. Es difícil para una cocinar cuando no puede frenar la fuga de los ojos.
El pastel queda bien, pero yo no. Lo regalo. Ojalá pudiera tirarme a la basura yo también. Ojalá pudiera tirarme yo también a la basura.

Antes de salir a interpretar, me fumo un cigarro en el callejón detrás del teatro. Me avergüenza que me estoy haciendo daño activamente, cuando prometimos que sólo sería de manera pasiva;
Que sólo lo sugeriría. Que si estoy con alguien, debe saber de mi condición mental. De las consultas semanales. De las pastillas que aborrezco tomar. 
Expondría los cuchillos y no los volvería a mencionar.
Un suicida no deja de serlo. Un alcohólico no deja de serlo, sólo deja de tomar. 

Me molesta que me digan "yo te entiendo"; no entienden ni puta madre.
No saben lo que es depender de un fármaco extraído de un insecto que está extinto. 

Y por eso recurro a la medicina moderna, a los transplantes.

Ahora estás viendo todo el daño que te prometí.
Toda la negatividad que nunca negué.
Todo el fango y pasto en descomposición dentro de este disfraz de modelo.
Ojalá fueras peor persona, y así merecerme.
Pero estás aquí por voluntad propia, y no te lo perdono.
Pudiste haber permanecido al otro lado del mundo, con otra chica más bonita que yo que no tenga estas fracturas. Estas estrías mentales resultado del condicionamiento operante.
Podrías tener 2 novias si quisieras.
Te haré saber de mi corrosión, para que decidas bien.

Nunca me acostumbré a ti.
A tu estatura, a tu complexión. A que hay verduras que no te comes. A que tomes coca.
A que tengas esa fea canción como alarma despertador.
Tus detallitos me fastidian, al mismo tiempo que los he memorizado.

Eres una excepción porque no me he cansado de ti todavía.
Eres mi "nada".
Y qué bueno que no me necesitas. 

-CriOfelia
Incompleta a propósito.
Quiero estar mal para que no vengas a rescatarme.
Ya ves que los artículos de catálogo también podemos amar.


octubre 30, 2022

Aquelarre Maleficarum. 12: O sea, pude haber estado muerto todo este tiempo. [Fragmentos]

12.- O sea, pude haber estado muerto todo este tiempo.

 

En casa no hablamos de depresión.

No hablamos de eso, realmente, sólo lo mencionamos. Pero por cómo se expresan, se nota que no entienden. Y no es su culpa. No han pasado por eso, afortunadamente. No tienen ese daño.

Si esos temas se tocan, lo hacen de manera muy parcial, con mente cerrada. Por eso no puedo acudir a ellos si no estoy bien. A veces sí pienso en terminar con esto para ya no tener que lidiar con nada. A veces me fastidio al grado querer tomar decisiones drásticas para ya no tener que volver a verlos. Así me han hecho sentir con sus comentarios estúpidos.

 

[]

O sea, pude haber estado muerto todo este tiempo, y esta chica egoísta me privó todos estos años del descanso eterno que tan merecido tengo. Pudo haberme dado la razón perfecta para irme por fin.

[]

 

Tengo que juntar dinero y arreglar mis cosas y asuntos por si algún día falto, ya sea por accidente o que el destino me reclame porque constantemente lo estoy ofendiendo. Y así al menos no se vean en un aprieto económico porque las circunstancias me desfavorecieron y todos mis planes quedaron truncados. Al menos eso me importan. Pero creo que no mucho más.

 

Soy más feliz si vivo apartado.

 

A veces pienso que cuando regrese en el tiempo, depende qué tanto vuelva, 

[]

He hecho suficiente daño, también eso le ahorraría a los demás.

 

No vivo por nadie más. A veces ni por mí.

Y mis opiniones y motivaciones no cambian por el simple hecho de estar acompañado.

Siempre voy a ser alguien dañado, y sin ganas de arreglarme, así estoy bien.

Siempre voy a ser una ruina, una decepción.

Siempre voy a tener mi éxito medido en mi propia forma, que es tener la colección de discos.

Aspiro a poco en la vida.

Si alguna vez vuelvo a tener novia, 

[]

Luego va a querer que tome terapia,

[].

 


Aquelarre Maleficarum. 11: Hieresilvania [Fragmentos], +3

11.- Hieresilvania

 

[]

Ya no podía estar en esa casa. Se había vuelto sólo un refugio material contra la lluvia, el sol, el polvo, la intemperie.

No sé por qué estaban juntos, si no se querían.

[]

 

Me fui dejando una nota, y un sobre con dinero. 

[]

Después de sus “no le digas que yo te dije”, y sus “es que se enoja si tal y tal”. Después de sus suposiciones, y su cizaña sembrada en otras personas sobre mí, y su intolerancia. Ellos no eran libres.

Ya no podía estar en una casa donde esa pareja se era infiel mutuamente, y no sólo de manera carnal.

 

 

 


 

{}

 

Cuesta trabajo mantenerse despierto.

Por supuesto que no te voy a decir,

cuando me voy a dormir y desearía ya no despertar.

Desearía desaparecer sin dejar rastro, sin dejar recuerdo,

de que me conociste,

de que fui hijo de alguien,

hermano,

tío,

amigo,

ex-pareja de alguien.

Irme sin dejar huella, sin ruido, sólo un paréntesis que se cerró.

 

{}

 


 


Aquelarre Maleficarum. 10: hxyyy3rysonna [inexistente], +2: A veces sólo las piernas.

10.- hxyyy3rysonna


 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

{}

A veces sólo las piernas.

Me gusta que sea tan resistente, para no preocuparme por dañarla. Me gusta que por ser sintética no me pida de comer, no me pida que la saque a pasear, no me pida amor. Porque amor, no tengo, para un juguete. Me gusta no tener la responsabilidad de otro ser humano, ni ser dicha responsabilidad[G1] . [G1] 

A veces, después de lavarla, no la vuelvo a ensamblar completa: no le pongo los brazos.

{}

Programable con inteligencia artificial limitada.


 [G1]Si tuviera una pareja que se puede morir antes que yo, y eso sucediera, tendría que contactarme con su familia, organizar su funeral, arreglar sus asuntos. Me gusta NO tener que hacer nada de eso, al tener una sintética. Si se descompone la mando a arreglar y ya.

 


octubre 29, 2022

Criofagias.

Cuando te encontré en el parque, eras nada.
Estabas sucia,
extraviada
vendiendo basura
te traje a casa,
te bañé,
te peiné,
te alimenté

La primera vez que te estrangulé, no te defendiste, creíste que eso era parte del trato,
luego aprendiste de mí,
tuviste seguridad en ti misma,
comiste mundo de mis manos, y fueron tuyas un tiempo, 
te recorrieron, te conocieron,
me alimenté de ti,
te chupé,
después ya no aceptaste mi violencia,
ya te defendías, no te quedabas quieta,
quisiste ser independiente, tu propia persona,
te creaste un brillo en los ojos,
hasta para querer exigir derechos.
No te lo permito.
Sigues siendo lo que eras.
Por eso no usé mis manos, usé un tubo de metal.
No me detuve hasta que apagué tu brillo. Hasta que de tu cráneo brotó un río que al bajar dividió tu cara.
Para que te callaras, para que ya no hicieras ruido, 'ya no existieras.

tu casa era el parque
aquí te encontré, aquí te vuelvo a tirar. 


Marseille, France.


-Ofelia Camille

diciembre 10, 2021

Basado en hechos reales que me contaron.

Libro cerrado. Todo fue ficción. 

 

Contigo, ya puedo decir que he estado con todo tipo de personas.
Vi algo en ti que consideré en nuestras posibilidades poder conservar.
Pero no lo logré, no lo logramos.
Realmente, no te conozco. No te podría predecir.
Creo que tropiezas, te dejas caer, y te hundes en depresión y te quedas ahí, porque esa parte de tu mentalidad sí la conocí.

Victimismo. 


Creo que haces eso para probar a la persona a tu lado. Lo probaste conmigo, y te falló. Y por eso ya no estás en mi vida.

Me enteré del choque de autos.
Sobreviviste, pero, ¿para qué?

Años después me mandas mensaje Sandra, sorpresivamente y no sé qué pensar. Termino sintiendo nada por eso, por ti, por nosotros. Nada de eso quedó aquí. Aprendí con las explosiones y ahora aplico ciencia para desmoronar esos interiores. Lo apliqué bien contigo, porque aprendí poco con nosotros. Fue suficiente. Y ahora estoy mejor. En esta ocasión no hubo estallido, desintegro el sentimiento y no queda cicatriz. Queda un recuerdo, que tiene su propio peso. Objetividad. Y ya.
"Parece" que estás mejor que antes, porque no expresas drama estúpido ni pesar/resentimiento porque fui yo quien tomó la decisión difícil.
"Parece" que lo aceptas por fin.
"Parece", porque eso sí conocí, que se te dificultaba aceptar la realidad tal como eso. Quizá eso cambió, no estoy ahí para saberlo, para comprobarlo, no estoy ahí ni ahora para que me importe. En tus palabras hay algo incrustado que no descifro, que no sé qué hacer de eso, termino haciendo nada, porque no me queda el tiempo como para perderlo en eso. No me ayuda, no me sirve.

Qué bueno que pienses que estás mejor.

Ahora tengo de vuelta el regalo anticonvencional que te hice.

Te facilito el proceso para que ya puedas empezar a aprender a dejar ir:

Ya puedo cerrar y tirar este libro a la basura. Para lo que sirvió, tiempo perdido.


Llegué a la misma conclusión.
Mejor estoy sin pareja, si van a seguir exigiendo algo que no puedo dar, porque no tengo.

© M. Rails. 2009, 2012.

febrero 04, 2021

Eventual

No soy agresivo.
La vida es agresiva.
Yo sólo soy natural.

Soy terror y lágrimas.
Soy saliva, hueso y piel.
Soy un licuado de ponzoña con hielo.
Cargo un corazón ligero.
Congelado y fracturado.
Todas las piezas están ahí. Todas las piezas están rotas.
La psique ya no sabe para donde huir.

137650
10403329610
7



enero 26, 2021

Oink.

Si tuviera una novia chichona sí me gustaría que usara escotes hasta el ombligo y que se pusiera falditas o short con los que se le note todo. Me gustaría que otros hombres la deseen.

Pero bueno, eso es porque soy un puerco y tiendo a sexualizar todo, antes de racionalizarlo.
Así, seguiría deseando a otras mujeres que vea, aun cuando tenga a mi novia.

 

Ahora, ¿por qué le darías más importancia a esto que acabo de escribir, que a otras cosas “bonitas” que escribí antes?
#todoesficción , somos ficción, sólo pretendemos existir, estar bien, quererte.