6, El fin


Ishigo Ishimaru, estás mal de la cabeza; imagen 6

abril 28, 2010

09: Soñé que...

Aún quedaba tiempo y decidí donar mis órganos.
(Ya no quiero vivir)
Mi amiga Suzel realizaría la última operación.
(Fue una petición especial)
Hicieron excepciones por mí, había tres helicópteros en la azotea, y las pocas personas que aún quedaban en mi vida me acompañarían mientras ella realizaba el explante.
(Se quedan a llorar)
Todos mis órganos útiles se habían removido y sido trasladados a personas que lo necesitaban más.
(¿Por qué? Estaba sano)
Aún conectado a máquinas que me mantenían funcionando, ella cuidadosamente realizó las incisiones, y el explante estuvo completo.
(Sonreí, todos lloraban, bueno, casi todos)
Suzel mantuvo su mirada seria mientras colocaba el corazón en el recipiente. Se alejó de la sala, y rompió en llanto una vez que estuvo sola.
(Ella no quería eso)
El final de la guerra. Ahora sé que estoy completo y roto.

abril 21, 2010

15: Si yo fuera rico.

Si yo fuera rico, no me compraría cosas caras, pero tendría un cuarto grande.
Me compraría los discos de la música que me gusta, pero me daría vergüenza que vieran mi memoria reproductor de 8 gigas.
E iría a Burger King una vez al mes, porque me encantan las hamburguesas de ahí.
Pero no más, porque aunque fuera rico, no me gustaría tirar el dinero.
No me compraría ropa cara, tendría poca, pero bien cuidada.
Seguiría teniendo mis mismos colores y crayones rotos, y difícilmente me compraría unos nuevos.
Le compraría muchos regalos a mis amigos, y se los entregaría personalmente.
No me inscribiría en cursos absurdos de cosas que no necesito saber.
Iría mucho a la playa pero no me quedaría en hoteles, y regresaría el mismo día.
No tendría coche, usaría siempre el transporte público.
Pero cuando anduviera con mis amigos, siempre les pagaría el taxi o la gasolina.
Siempre viajaría ligero, y con algo para beber porque me deshidrato.
Pero no viajaría mucho, porque de todos modos casi no saldría de mi casa aunque fuera rico.
Me compraría una laptop usada y la cuidaría mucho, y no la sacaría mucho de mi casa.
Si fuera rico, no cambiaría de celular, sólo le repararía el teclado, y trataría de tener máximo 50 pesos de saldo, no más.
Y saldría con mis amigos cada semana a comer nieve, porque me gusta mucho.
Si yo fuera rico, aún no iría al cine, porque se me hace muy caro, las películas, prefiero bajarlas; mejor invito a mis amigos a mi casa y preparamos palomitas.
Y me haría de un sistema de sonido porque aún sería muy sensible a la música, pero lo conseguiría usado o en algún sitio de todos modos, nunca iría a tiendas departamentales.
Y conectaría mi laptop para envolvernos en la película.
O en la música si hiciera una fiesta.
Pero casi nunca haría fiestas, sólo cuando alguno de mis amigos cumpliera años y no pudiera ser en su casa.
Compraría pastel.
Compraría pastel seguido y lo tendría en mi refri.
Y siempre habría frutas y verduras en la mesa si yo fuera rico.
Arreglaría todas las mañanas mi cama.
Y seguiría lavando mi propia ropa en la lavadora.
Si yo fuera rico, viviría "solo". Porque tendría vecinos o me mudaría cerca de un amigo. O invitaría un amigo o amiga que se mude conmigo.
No me compraría un montón de consolas, seguiría teniendo mi pequeña DS.
Y jamás contrataría una sirvienta. Haría todo el aseo yo.
Y aún me daría vergüenza ir a restaurantes, se me hacen un poco caros.
Pero daría buenas propinas si tratan bien a mis amigos.
Si pidiera comida a domicilio, aún así no daría propina al repartidor.
Preferiría cocinar, me gusta cocinar.
Me seguiría pasando mucho tiempo en la computadora.
Si yo fuera rico, no necesitaría trabajar, pero me conseguiría algo de medio tiempo para sentirme útil.
Y trataría de pasar desapercibido porque aún no me sentiría especial.
Le enviaría dinero a mis familiares cercanos en sus cumpleaños, porque no viviría cerca de ellos.
Si yo fuera rico, no pagaría nada con tarjeta de crédito, sólo la tendría para sacar del cajero. Y nunca tendría mucho dinero en casa. Y siempre estaría en un cajón, listo para ser gastado. Y cuando me fuera de compras seguiría comparando precios y no gastaría todo.
Visitaría a mis amigos que viven lejos y les invitaría la comida y la pasaríamos muy bien, aunque no lo haría muy seguido para poder extrañarlos. Y me imagino que se cansan de mí...
Sí, aunque fuera rico me deprimiría de vez en cuando, porque, verás, el dinero no es la felicidad, sino lo que haces con él.
Y todo ese dinero no curaría mi corazón.
Así que preferiría pasar esos últimos momentos con las personas que me importan.
Les prestaría mis cosas, si me las piden, o si me entero de que necesitan algo.
Total, me las podría comprar de nuevo, y no me enojaría si las pierden, al fin y al cabo son "cosas"...
Aún lloraría de vez en cuando sin razón, porque entristezco de pronto sin poder ni querer ya evitarlo...
Y escucharía a mis amigos siempre que hablaran, y trataría de ser más comprensivo con mis parientes, considerando todo lo que han hecho por mí.
Y me buscaría una buena mujer pero no le diría que soy rico ni lo haría notar porque aún se me haría muy difícil confiar en alguien.
Si yo fuera rico, lo que haría con el dinero, sería hacer sentir mejor a las personas que me importan en esta vida.
Porque aún sin dinero, me siento rico, debido a ellos.

abril 19, 2010

06: Fe en ti

Sólo otro momento antes de saber lo que he vivido mil veces.
Me sigo ahogando en sangre que hierve y arde, y tú descansas en tu cruz muy cómodamente.
Desde este abismo en medio del mar, volteo hacia arriba, aún veo tu luz, y la envidio.
Decido desmayarme y recordar en sueños lo que me hiciste.
Vivo caminando en eterna combustión gracias a ti, a lo que me dices que merezco.
A tu castigo.
Por querer ser como tú. Por querer estar a tu lado. Por mi arrogancia.
Muero en vida debido a ser tu hijo. Y hoy descubro que eres el más arrogante; pues no permitirás alguien a tu lado, sólo debajo.
Y por eso siempre estarás solo.
Sigue dormida, sigue soñando que tienes sexo con todos, sigue teniéndolo de verdad.
Sigue comiéndote todo lo que no te gusta. Sigue soñando que nos lastimas. Porque el mundo es tu víctima.

Despierto, el mar frente a mí.
Y cuando bajó la marea, vi tus cadáveres, y reí mucho.
Pero yo ya estaba muerto.
Me elevas con luz infinita hasta cerca de ti.
Y me haces parecer como el malo.
Me ordenas, y yo te obedezco.
Abro mis brazos mientras el fuego se escurre por mis alas, con los ojos cerrados, sonrío.
Me doy cuenta de que he pasado esto mil veces.
Me voy derritiendo al sentir tu amor.
Y mis pedazos derretidos caen al mundo y lo van enfermando.
Me dejas descansar después de haber pasado milenios siendo tu enemigo.
Sonrío y soy feliz, porque sólo quise complacerte.
Y durante eternidades completas sólo me ordenaste sufrir.
Ahora me ordenas diferente.
Y es un honor morir por ti.
Ya no siento que me ahogo, mis pulmones han muerto.
Ya no siento que me quemo, el fuego se ha comido todos mis nervios.
Eres injusta, pero no puedo evitar amarte.
Y te agradezco tanto que todo termine una vez más.
Cierro mis ojos mientras abro los brazos, mis alas escurren fuego, y sonrío.

abril 15, 2010

07: Devores

Duermes, y estás tan preciosa, y eres tan perfecta.
Y sé que esta noche voy a hacer todo acabar.
Te hago el amor y abusto brutalmente de ti. Estás inconciente y no te mojas, pero te hago sangrar. Despiertas en gritos incomprensibles y te hago callar a golpes. Y sonríes y después de unos segundos te das cuenta. Caes en un desmayo que restaura mi control sobre ti. Físicamente, no eres para nadie más. Tú apreciaste mi cuerpo tan extraño y me dejaste dominar el tuyo. Y reino aquí junto a ti y clavo mis agujas en tu cara.
Sostengo la hoz en tu cuello.
Despiertas, y estás tan sorprendida. Y te excitas demasiado.
Y después de mil doncellas no encontré a alguien como tú y por eso me estoy rindiendo.
Y te amo y me odio y quiero destruirte.
Y te odio y te amo y quiero morirme.
"Sé un cuchillo para mí", me susurras, y yo te obedezco.
"Sé la uva y no me dejes caer" me dices suavemente.
"No existe el mucho en un te amo" te trato de explicar, no existes sin amor. Y yo te amé demasiado. Y seré el vino y tú serás mi alimento. Y me beberás y yo te comeré. Quiero comerte. Quiero cortarte y rebanarte. Cocinarte y guardarte para cuando me dé hambre y tenerte a mi lado. Y que te pudras. Te descompongas y enterrarte. Pasar siglos pensando en ti e intentando remplazarte. Hacer trajes con la piel de otras doncellas y pretender ser tú.
A través de la hoz siento en mi mano los latido de tu cuello. La emoción y la excitación que sientes me ruegan que te la dé. La empujo gentilmente y tu vida me salpica la cara. Y veo mil orgasmos y mil muertes en tus ojos. Y después de haber memorizado mil rostros siempre serás mi favorita. Te chupo, te bebo, te ingiero. Tus huesos regurgito y te entierro. Me voy a dormir con una gran sonrisa y los líquidos que de ti se desprendieron en mi cara, sabes dulce, salada, a carne blanda intacta. Saben tus ojos a agua. Tu médula a sebo.
Le susurro a tu fantasma que nunca te olvidaré por haberme hecho una chica tan feliz.
Desde mi tumba, sonrío. Y te recuerdo con cariño.

abril 09, 2010

01: Voces

Abrí los ojos, y te vi.
Abrí los oidos, y te oí.
Presté atención. Y contemplé.
Te puse atención. Y te observé. Y te escuché.
Y te vi crecer y comulgar. Te vi morir y hacer guerra.
Te vi forjar amistades y forzar paz.
Te vi nacer y comerte a los tuyos.

Como todos los males, me repito a mí mismo.
Y me quiero morir, y te quiero destruir.
Brillo en un cielo que no tiene sol.
Sangro y lluevo sobre tierra muerta.
Ardo y lloro sobre gente extraviada.
Y tú no me escuchas a pesar de que yo te amé.
Y no puedo despertar a pesar de que yo creé todo esto.
Y sus voces tan pequeñas no me tienen entretenida.

Me ahogo en sangre que hierve y arde mientras tú sigues en tu cruz.
Y cuando desperté vi el mar.
Y cuando bajó la marea, vi tus cadáveres, y reí mucho.
Pero yo ya estaba muerto.
Muerto en vida.
Vivo caminando en eterna combustión gracias a ti. A tu castigo.
A mi arrogancia. A querer ser como tú.
Gracias a ser tu hijo y querer estar a tu lado. Y hoy descubro que tú eres el más arrogante; pues no puedes permitir a alguien a tu lado. Por eso siempre estarás solo.
Sigue dormida, sigue teniendo sexo con todos. Sigue comiéndote lo que no te gusta. Sigue teniendo pesadillas que nos lastiman. Porque el mundo es tu víctima.

Siempre lúcida, camino entre flores rojas. Y el sol brilla en mi cara. Y la luna brilla en mi mano. Y el mar sopla en mi oreja. Y el desierto resopla en mi vientre. Y la humanidad grita por auxilio. Y yo les amo tanto que les mando mares de sangre. Para que ahoguen sus preocupaciones. Para que naden solos. Para que aprecien a Dios. Para que renuncien a Satanás. Beban y envenénense hijos míos, porque yo me comeré al último de ustedes para morirme también. Y nos iremos juntos al infierno, que es un lugar bonito en esta época del año.

Sostengo la hoz junto a tu cuello, porque quiero verte morir. Quiero verte ahí por mí. Quiero ver el amor en tus ojos, y verlo desvanecer junto a tu vida. Ojalá hubieras entendido, ahora ya no importa que no seas como yo. "No existe el mucho en un te amo", pero yo te amé demasiado. Y no existes, sin amor. Quiero comerte. Quiero rebanarte y comerte. Y que te pudras. Y te descompongas y enterrarte. Quiero que seas mi última esposa. Y quiero vivir cien años pensando en ti. Y quiero intentar remplazarte y despedazarlas también. Y encontrar mil doncellas que no entiendan tampoco y comérmelas también. Y comerme sus órganos y hacer un traje de su piel, y pretender ser tú. Sostengo la hoz contra tu cuello, y veo tu pecho latir, y tu emoción y excitación me hacen empujarla más, hasta que salpicas. Y veo los orgamos y la muerte en tus ojos. Y después de mil doncellas muertas siempre serás mi favorita. Y cuando vaya a dormir susurraré que aún pienso en ti por haberme hecho una chica muy feliz.