6, El fin


Ishigo Ishimaru, estás mal de la cabeza; imagen 6

mayo 30, 2012

Primeras segundas lluvias


Cada año te espero con ansia. 
Todo comienza cuando te escuché con un suave murmullo, discreta, así eres. 
Salí a recibirte, te encontré en las escaleras, te precipitabas suavemente. Y no estabas fría. 
Chocaste con los infiernos ocultos en mis ojos. Lo que escondo de los demás. 
Y se escurre negro por mis mejillas. 
Era insoportable el calor que salía por mi garganta. 
Me invadiste. Me envolviste. 
Y me convertí en vapor. 

mayo 28, 2012

Cadena alimenticia


Vi: Voy a bajar de peso, y me pondré bien buena para que todos me hagan caso. 
Ix: Cuando te pongas bien buena te dejaré de querer.
Vi: ...
Ix: Ya me pasó antes, que se sube a la cabeza y se cree más sólo por estar "más bonita"
Vi: Me lastimas...
Ix: Y a mí me lastiman las incertidumbres
Vi: ¡¿Eso qué tiene que ver?!
Ix: Te estoy avisando. 

mayo 25, 2012

Brenda


Ese primer concierto...
bailamos hasta que las lágrimas dejaron de salir...
Me arrepiento porque no entendieras mi conmoción...

Ix.

No es porque tu nombre empiece con I.
Ni porque tu otro nombre empiece con I.
¿Recuerdas? Dices que no.
Yo lo recuerdo. La espuma estaba sucia, el mar sangraba.
Mi madre conocía a la tuya.
Una de mis tías era hermana de una tía tuya.
Pero no nos conecta la sangre.
Tú no lo recuerdas pero platicamos mucho esa vez.
Era en la tarde viendo al mar.
De las primeras personas que no me interrumpían al hablar.
Ese niño era muy tímido.
Sepultamos esa identidad con una pala y un machete.
¿Recuerdas cuando morí? Yo sé que ese día sí lo recuerdas.
"2 metros" decías. "2 metros... creo..." Ni tú ni yo sabíamos.
Y plantamos un naranjo en donde enterramos a esa pobre chica.
Años después me enteré sus padres la seguían buscando.
Fue la primera vez que cavamos juntos.
La misma complexión y el colgante de mi madre.
"Georgina yace aquí" escribimos 13 años después.
¿Recuerdas? Ya se viene su aniversario.
¿Recuerdas? Viajé al DF para las falsificaciones.
¿Recuerdas? Te presumí el volver a nacer.
¿Recuerdas? Di a mi hija en adopción.
¿Recuerdas? Tus visitas a la clínica.
¿Recuerdas? Te peleaste con los doctores y los llamaste "unos puercos". Y se hizo tu frase entonces.
Yo lo recuerdo, la espuma estaba sucia. La luna a medio llenar.
Pedazos de carbón regurgitados por la marea.
El segundo día fue más breve, recortado. Pues te tenías que ir.
¿Recuerdas? Sigo siendo de los pocos parientes que nadie menciona. Y con razón, se supone que estoy muerta.
Yo sé que no lo recuerdas, ni por la segunda vez, cuando comimos mariscos y tus modos especiales. Y nadie te entendía. Me pregunto si eso cambió.
La enterramos y plantamos un naranjo arriba de ella. Y le intercambié dos muelas con las mías.
Esa nocha la luna estaba a medio llorar.
Es porque nos conocimos en Ixtlán. La familia de mi padre era de Colima. Fueron mis últimas vacaciones ahí antes de mudarnos otra vez.
Ya no me culpo por su muerte. Sólo la encontramos, ¿recuerdas?
Estoy aprendiendo a olvidar, tú estás aprendiendo a no recordar.
Y años después los caminos se volvieron a cruzar.
El porvenir languidecía doloroso y deprimente para quien lo contemplara.
Quién más, sino nosotros.

Quizá no lo recuerdas, la memoria es engañosa. Y entonces éramos otras personas.

mayo 19, 2012

El día que desapareciste.



Te busqué en hospitales.
Te busqué en la morgue.
Te busqué hasta en tu casa.


Me vacié un tazón de ensalada de zanahoria en la cabeza. De esa que tiene piña y nuez y crema.
Dos amigos tomaron fotos y luego me vertieron leche encima.
Sólo entiendo que es arte y tristeza.
Las lágrimas hacen una franja morada bajo los ojos debajo de la regadera cuando fui a limpiarme.
Y les dije que no me tocaran.
Mis amigos reían, sobretodo ella.


Cuando estoy desnuda huele a látex.
Cada dos días, casi no sudo por las pastillas y el clima en que vivo.


Aún recuerdo el dolor cuando desperté y tenía los tornillos en la mandíbula.
Aún recuerdo cuando despertó en la mesa de operaciones y le había atornillado la mandíbula. Respiraba rápidamente por el pánico y la confusión.
Le dije que sabía lo que sentía, todavía no me había quitado todo el metal de mi boca.
Y seguí atornillando y sus gritos ahogados me excitaban.
Y seguí apretando hasta que la boca se me llenó de sangre. Entonces la quité de la mesa y le corté en la pierna.
Recuerdo tus ojos el primer día.
Recuerdo sus ojos el segundo día. Cómo se iban apagando de vida al igual que su calor corporal.


Busqué en tu cuarto alguna pista pero sólo encontré las cintas de todas las chicas que maltrataste.
No sé por qué me excitaba al verlas. No podía dejar de verlas. Me masturbé con el control remoto.
Me gustaba todo lo que les hacías. Cómo les abrías heridas y metías tus manos y sacabas sus interiores.
Me gustaba ver cómo las golpeabas brutalmente. Me gustaba ver cómo las penetrabas después de horas de estarlas provocando.
Me gustaba verte comerlas.
Me gustaba ver cómo las bañabas con sangre de alguna otra chica anterior.
Pero mis videos favoritos fueron los de las mujeres embarazadas.


Me prometiste que habría más como yo.
Más semillas.


Parece como si hubiera sido hace tres días que hace seis meses no sé de ti.


Ese día era sábado, y también llovió.


Ese día fui a un club, bailé y tuve sexo con un desconocido.
Se lo hice tan fuerte que lo lastimé.
Le robé su cartera y celular.


Me desensibilizaste y por eso ahora no me importa toda esa gente para la que modelo. Así como no importo para ellos.
Un día portaré una bomba y me los llevaré conmigo.


Tú sabes por qué no tengo mascotas.
Soy demasiado curiosa y por eso pasé un tiempo encerrada.


Te busqué un número exacto de horas.
También como ese día, hace tres que golpeé una tipa hasta dejarla inconciente.

Secretamente (5)


Me importas suficiente para no contarte cómo me siento. 
Lo escribí antes, esto pasará... 
Si digo que estoy "bien" suficientes veces, eventualmente lo estaré. 
Si me hago sonreir me sentiré mejor. 
¿Así funciona con ustedes no? 
También, estoy a punto de hacer lo que otros me dicen que hago "bien". 

No creo... que entiendas cuánto más me puedo llegar a detestar... 
Si hago lo que los demás quieren que haga. 
Si soy lo que los demás quieren que sea. 
Si sigo su juego, me haría uno de ellos. 
Dejaría de ser yo, para ser uno de ellos. 
Si sigo su juego, lo ganaría. Y nadie más volvería a ganar. 
No te subestimo al decir que no creo que lo entiendas. Es que no sabes cómo es ser yo. Tú sólo sabes ser tú. A veces. 
No hay escapatoria y los vidrios no cortan suficiente. 
No hay suficiente azúcar o cafeína en mi sangre. 

Por eso nunca he dicho que me gusta escribir, lo haga bien o mal. Pero escribo mucho. 
No he dicho que soy inteligente, al contrario, digo que estoy bien tonto, porque no sé resolver mis propios problemas. 
Soy bueno en cosas que no sirven en la vida "real". 
Por eso digo que la vida es difícil. Y me la paso soñando. 

Secretamente, quizá sí te guarde rencor porque tú sí tienes un futuro. 
Secretamente, he considerado los posibles desenlaces. 
Por eso escribí un par o 3 blogs con notas suicidas. 
Secretamente no he descartado "tomar mi propia vida". 

No quiero creer en el infierno, la vida YA es suficientemente horrenda, en potencia. 

A veces, por un instante, me repugnan las personas que presumen eventos que acaban de experimentar, o los objetos que recién adquirieron, lugares que visitaron. Lo sé, es que estoy vacío, y la envidia se cree muy importante para llenarme, pero no lo hace, porque el instante pasa. 
Y regreso a mi estado "Realmente, no me importa." 
Pues verás, al detestar, odiar, o enojarte con personas que ni siquiera conoces, les asignas importancia que no tienen. 
Es como la gente que se enoja con desconocidos en la calle, me dan lástima. 
Es como la gente que se pone a discutir trivialidades por internet, con desconocidos. Asco. 
Por eso no comento en muchos espacios así. Las criaturas están por todos lados. Y parecen pensar predeciblemente similar. Ahora imagínate tener que trabajar con "personas" así. Y lo he hecho. 
Ahora, no ahondaré sobre las indirectas, porque funcionan de dos maneras, quizá más, pero mencionaré dos: 
Las involuntarias; cuando escribes, dices una frase y alguna persona la malinterpreta o se la toma personal. Y a mal. 
Las voluntarias; con las que no estoy de acuerdo, que SÍ son para alguien pero no se las dices en su cara. ¿Cobardía? ¿Estrategia? Tus razones tendrás, pero no es el enfoque apropiado para enfrentar una situación que te molesta. 
De cualquier manera, todo esto es superficial. 

Ahora, esta nota está también en facebook. 
Estos días casi no me conecto. No sé a qué... casi no hago nada aquí, no tengo qué decir... Ah sí, las noticias de los grupos de música que me gustan. Esa es una buena razón. 

A veces, sí me enojo y le guardo rencor a las personas que aprecio. Pero lo hago secretamente, y las perdono. 
Te dije que me considero una mala persona, y no me interesa cambiar. ¿Para qué? Tendrías que aceptarme como soy, así como yo te acepto a ti. 
A veces, no me tolero a mí mismo. 

Recuerdo... uno de los dos temas de los que no platiqué con Miriam era el asunto del dinero. 
Acepto que lo "necesitas" en estos tiempos actuales para sobrevivir. Pero no "necesitas" mucho, sólo el suficiente. Y suficiente es suficiente para mí. Lujos... disfruto tenerlos pero no me duele cuando no los tengo. 
Una casa de dos pisos... un auto... mucha ropa... muchos zapatos... novedades en aparatos electrónicos... salidas al cine... comer en restaurantes... suscripciones a servicios... un ipod... una ipad... Ciertamente no necesito nada de eso. Tampoco tú, pero quizá tengas algunas cosas. No tengo algo contra ti personalmente, no es indirecta para alguien. 

Estaba bien en Toluca ganando 550 pesos a la semana en mi cuarto en el quinto piso. 

Quizá porque me sé administrar... Siempre apartaba dinero. Siempre tenía para alguna emergencia. Siempre me podía comprar algo que de verdad quería. 

No platiqué con Miriam de este tema porque ella no compartía mi punto de vista. Ella quería ganar más. También lo respeto. 

El otro tema era el suicidio. Como saben los que me conocen platico abiertamente de este tema, como de muchos otros. Y no tiene algo de malo. También platico de la muerte, porque es algo natural. El suicidio no lo es. Pero muchos otros temas tampoco lo son. Pero no comparo, sólo anoto. 
No llegué a platicar con ella de esto porque para ella eran ideas absurdas. 
Pues claro, sólo un suicida entiende a otro. Ella no lo entendió, simplemente. Aunque fuera feliz había cosas que siempre estaban en mi mente, en el fondo, guardadas. 

Así como en mi casa hablar de la muerte... Era casi tabú... como si hablar de algo lo invocaba o volvía realidad. 
Como si decir que una persona se va a morir lo provocara. 

A veces, cuando eres feliz, extrañas estar triste. 
Porque cuando has pasado mucho tiempo triste aprecias más la felicidad. 
Y nadie aprecia los buenos tiempos como nosotros. Nadie. 
Si alguien merece ser feliz, somos nosotros. Pero la vida no es justa. 

Si te digo que estoy bien, o "bien", o bien... Puedes creerme, o puedes preguntarme por qué. 
Depende de cuánto nos conozcamos te daré la siguiente respuesta. 
Mi vida no es interesante estos días. Prefiero que me cuentes de ti. Prefiero leerte. 
Vivo a través de otros. 

Secretamente oculto tus actualizaciones porque me parecen muy tontas. 
Y NO estoy diciendo que lo seas, nota la diferencia. Yo también hago tonterías. Y no me importa... esto soy, no más. 

Secretamente busco las palabras para despedirme de ti. 

Secretamente quiero estar contigo el resto de mi vida, y no como amigos, eso no me sirve al final. 

Y sí, escribí esta carta con varias personas en mente pero lo más probable es que no sepan qué es para quién. Por eso es secretamente. 

Pero bien saben que mis sentimientos son irrelevantes. 
Veo el panorama completo aquí. Por eso no me importa el resto de la humanidad, puedo prescindir de ellos, no los conozco. 

Secretamente a veces no siento algo cuando me confían algo que es fuerte para ellos. Pero tienen el regalo de mi consideración y les pongo atención. 

Secretamente es una regla que tus amigos me caen mal. Todos. En especial tus amigos hombres. Quisiera matarlos, pero recuerdo que te importan así que dejo de querer. Y comienzo a desear. 

Secretamente sé que nunca te conoceré en persona pero me gusta pretender que sí lo haré. Tú tienes la esperanza, no te la quiero romper. 

Secretamente me hace muchísimo daño platicar contigo por razones que ni yo entiendo pero sé que sería peor que te fueras de mi vida. 

Secretamente estoy enamorado de ti pero no tienes ni idea, de esto no. Y me lastima saber que eres tan feliz con otra persona. 

Secretamente le tengo envidia a mi hermano menor porque él ya falleció. 

Y algo así es ser yo. Por eso pienso que no sé quién querría estar a mi lado. Y por eso no culpo a las personas por irse. 

Claro, también soy la clase de persona que hace todo por amor. Todo. 
Me mudé de un ambiente agradable. Viajé cientos de kilómetros. Y ahora mi "corazón" está en ruinas. No me repongo. No veo desenlace feliz a esto. Así que me distraigo con otras cosas para evitar que la infelicidad se acumule y me corte otra vez. Porque secretamente me he seguido cortando, pero como dije antes, nadie necesita saber cuándo y cómo. 
El por qué es lo de menos. 

Secretamente, también sé como van a transcurrir sus historias. 
He visto por años cómo se cumple lo que pienso sobre ustedes. 
Y lo seguirán haciendo. 
Secretamente, sé que te espera mucho dolor pero he decidido no decírtelo. 
Si te digo, no querrás creerlo. 
Y me dirás "Tú dices eso porque tienes envidia", "Lo dices porque no lo conoces", "Dices eso porque me quieres para ti", o algo similar, y en parte tendrías razón, pero me importas más que eso, y lo sabes también. 
Sin embargo, mis palabras no te detendrían.

No te bastaría mi dolor por saber. También querrías el tuyo para finalmente creerme. 

Si te digo "Él no te conviene", no querrás creerlo. 
Si te digo "Pienso que no deberías", tú aún así lo querrás intentar. 

No te cuento del dolor que corre por mis venas porque creerás que es otro de mis síntomas. 
Este dolor vino después, cuando me dejaste ver tus futuros... 

Secretamente, me da miedo que me conozcas tan bien, y que tú también hayas visto el futuro, y lo que pasará entre nosotros. 

mayo 17, 2012

"El Origen"


"Cómoda sin ti. 
Enclaustrada en mi propio espacio, y a ti no te tiene que importar. 
Imágenes violentas rompen la agonía, los ojos en mis manos lloran sangre y gritan perdón. "

Sólo veo a la que no está aquí, a la ausente, a la enmascarada que pocos conocen. Y ni siquiera tú. 
Temo que podría haberte dado mi corazón muy pronto. 
Si te dijera que ya sabía que terminaría tu relación, ¿me creerías? ¿me habrías hecho casi si te hubiera dicho en ese entonces que terminarías con él? 
Cierro un ojo. 
Me deshago en llanto fugaz sabor uva. Gritos familiares y golpes en la endeble división de madera. "Ya cállate" dicen, "Debimos llevarte a terapia" dicen, "Debimos pegarte más para que aprendieras" dicen. 
Aquí no estás y hay un vacío entre mis piernas. 
La sangre en el piso se cristalizó en conmemoración. 
Mis familiares no inmediatos se enteraron de mi vida. A mí qué más me da, puedo prescindir de todos ellos. 
Blanco y negro. Cierro un ojo y las imágenes no paran de fluir mareándome con sus fuertes aromas inapropiados. 
Mis manos no se cansan de llorar, no, no se cansan, de llorar no, no, no se cansan de llorar. 
Pinté las paredes y cerré mis ciclos. Y padeces de cáncer en la sangre y no me lo confesaste. 
Y no te perdono por ser tan perfecta y preciosa y morir en mi cumpleaños como juraste que lo harías. 
Ciertamente hay un hueco en donde iba mi corazón. Mi alma te busca en el helado mar de almas perdidas. 
Hoy sólo respiro oscuridad y las paredes me relatan todos tus secretos, pero en desorden. No lo entiendo. 
No puedo hilar más allá de esas cuatro palabras que siempre repetías en secuencia. 
No es esto lo que querías lograr. No es aquí a donde querías llegar. 
No, no hay más que esto, sino esto. 
Estás lejos y me pregunto si me escuchas aunque guardo silencio. 
Pero has logrado el éxito y te has olvidado de mí. Me has dejado atrás. 
No estás aquí y si estuvieras te diría que no me sirves para que te volvieras a ir. 
Existes entre mis dimensiones pero no he podido comprobarte imaginaria. 
Nadie me cree que eres parte de mi imaginación. No, he llegado a convencerme yo misma que eres real. 
Y si existes, no formas parte de la balanza. Porque el miedo se ha convertido en dolor y me pesa el vientre hacia náuseas. 
Hay una poca de luz intacta por las veces que me convenciste de hacer sin considerar... Y he caído en tu juego vil sin que tú ya estés aquí. Repito mi realidad para darte la versión que quieres. He encargado que alguien cuide tu lápida aunque tu cuerpo no yazca en penumbras bajo tierra, descomponiéndose. 
No lo sé, lo ignoro. 
¿Qué clase de serpiente eres? Me gustan tus colores. Soy inmune a tu veneno, ya ves. 
Ha sido muy larga la explicación y no merezco que me leas esta noche, tarde, día. 
Caracol, espiral. De mar, de tierra, de viento. Eres de fuego y yo de madera. Me haces daño. Me consumes. Pero no puedo dejar de ser adicta a ti. 
Es algo orgánico que desciende en mí. Siempre desciende. Por los pies salen líquidos magenta que nunca te daré a probar. 
Sin destrucción no hay. Es, me falta argumento. Son dolores de soledad. 
¿Cuándo se volvió tan inapropiada la discreción? Me critican por mi voz baja. 
Y me hacen detestarme tanto que me grabo otra letra griega en el brazo. 
Después no tendré manera de explicarles por qué decidí transformar mi pesar emocional en decoración corporal. 
Ha sido larga la explicación y no deseo trascender ¿por qué no te vas? 
Lo peor es que me consta que me entiendes y no querrás irte de mi vida... 
no tienes, no no tienes, no la tienes, no tienes una idea de cuánto te quiero... 
Te mataría...
Las costras estallaron. Ninguno de ustedes me importa. Estoy sola en mi cuarto. Mi cama está en la esquina. Duermo entre líneas y formas y colores limitados. Cierro un ojo y veo gris. No me acostumbré a dormir acompañada, no logro conciliar el sueño... 
Sé que estás enamorado de ella, aunque seas un poco mayor. Ella sabe que le gustas, las mujeres notamos esas cosas. Pero no tiene idea de lo profundo que llegan sus raíces en ti. Morirías. Te mataría, si ella o tú me lo pidieran. 
Te mataría... ¿Pero quién me mataría a mí? 
Estoy muy drenada para seguir esto...

Sólo soy el reflejo de una de tus amigas nuevas. 
He quedado marcada por la ocasión en que nuestras pieles se conocieron. 

mayo 16, 2012

Melliza.


No pude salvarte así que rompí la única entrada a tu mundo.
"Necesitas un mejor espejo" (-Me dice su voz. Ustedes dos eran amigas. )
--
(Ahora yaces en el piso y todos tus ojos me miran. Y te quedas quieta en el tiempo. )

7 años robados.


Cuando junto los pedazos, lo que tengo es eso, pedazos.
Pedazos que me cortan las manos.
--
parte 2:
Aunque junte tus extremidades y te las pegue no vuelves a la vida.
No se curan los tejidos ni te fluye otra vez la sangre.
Así que tiraré tu cabeza en la hoguera.
--
parte 3:
Mis manos agarran los fragmentos en el suelo pero no los puedo levantar.
Me cortan, sólo me cortan en los dedos.

Piel.


Regreso a mi nido.
Regreso a ser serpiente.
No necesito manos ni pies.
Con el veneno de mi boca te mataré.
Me dislocaré la mandíbula para tragarte completa.

mayo 12, 2012

Pastillas invisibles.


No las veo pero las siento en mi mano cada vez que inclino la botella.
Una cada día para mantener la demencia a raya.
Dos no hacen el doble de efecto...
¿Pero para qué son?
Son para no querer ser algo o alguien...
Son para no querer hacer algo con mi vida y mi capacidad...
Para no marcar al mundo.
Se llaman pastillas invisibles pero no me hacen invisible.
Sólo me hacen sentir así.