6, El fin


Ishigo Ishimaru, estás mal de la cabeza; imagen 6

noviembre 25, 2015

Rodeado de flamas (fragmento)

Me aterra quitarme la armadura porque sé que me van a volver a lastimar.
 
No me siento "especial" al decirte que te quiero porque seguro otros más te lo dicen
y tú quieres a alguno de ellos más que a mí.
 
Ya no hay corazón en la mente que puedas lastimar.
 
Es divertido esto de gritar estando afónico.

Abrí el gas desde la estufa, esperé suficiente y encendí un cerillo.
Me quedé en la sala rodeado de flamas.
No están las culpas en la piel, que quiero quemar.
Están en el alma.
 
Están en individual los fantasmas azules de mi ironía.
Singular, en plurales. Y viceversa eres también.
Te quiero, pero no puedo detenerte de destruirme.
 
Bienvenida a mi mundo, donde el suicidio es norma, y ser feliz y
estar completo es opcional.
 
Tú ya eres fuego, así que estás contenta. Se te meten en los ojos y no lloras,
sino que bailas, y rasgas las cortinas con tus garras.
Me haces feliz, pero también me haces ciego.
Rodeado de escamas, me escurro debajo de los muebles, donde no me puedas ver
donde no me puedas pisar.
Y salto y te comprimo en espiral alrededor de tus huesos que truenan dentro de tu carne.
 

{continúa en el libro}